and we love them too!
Siempre he dicho que lo que falta en Panamá es coherencia en las colecciones. Además de todo el trabajo manual que se necesita para lograr que una línea sea exitosa, debe empezar por tener una inspiración, un propósito, en fin, debe contar una historia.
Antonio hizo exactamente eso.
En su primera colección dio cátedra de como se debe tejer un cuento alrededor de los looks. Con solo 18 años (y esto no lo digo porque sea mi amigo), comprobó que la moda es cuestión de inspiración. Que hay que entenderla, tener un patrón en la mente de lo que se quiere hacer y ejecutarla a la perfección.
Ya todos sabíamos que se llevaría el premio a Mejor Diseñador Emergente de la Revista Ellas, pero ver su colección en la pasarela fue una experiencia de otro mundo.
Los pasteles fueron reyes en la paleta de color. Blanco, rosa, lila y un estampado inspirado en las paredes del palacio de Versalles estuvieron plasmados en piezas clásicas y usables.
Las camisas de cuello cerrado eran muy del estilo Antonio, es casi un signature look de su estilo personal. Para acompañarlas, Antonio le dio personalidad a la falda de corte A con una forma burbuja, realizó perfectos pantalones pitillos y trajo a la vida la falda pencil con peplum.
Lo que mas me gustó fue el detalle de las flores que sirven de broche. Estaban hechas de un material parecido a la cerámica y al unir el cuello de las camisas no puedes evitar gritar THAT´S SO ANTONIO.
A Antonio le espera un futuro brillante. Yo lo se. Lo sabemos todos.
xx
ACC
